Y siempre que volví a casa me sentí envuelto en un aura protectora

DIARIO DE ZOLPIDEM: LA CASA EN DONDE SE SALVÓ MAMI


Martes 5.30am_¡Por fin un poco de silencio! Le debo a Juanma la saludable revelación del azúcar moreno, que es una teoría más sana que la ortodoxa. Ahora beber un café caliente es un ritual que no quebranta ninguna de mis reglas alimentarias. Ahora lo tomo sin sentir el peligro de una diabetis y no como antes, que lo bebía pensando en cuántas células cacerígenas alimentaba el azúcar blanco. Aunque también pienso a veces si no será reversible el daño que le infringí a mi organismo en estos 40 años.

En un aspecto más romántico, el predilecto Pifarré me acompaña desde que me senté a escribir. Lo mismo albur y Recién nacido.

Miércoles 18, 9.10am_Diario de Zolpidem_Después de dos meses de abstinencia, hoy mamá irá hasta lo de Emiliano a buscarse su zolpidem. Resulte como resulte esta recaída, estos han sido los meses más felices de mi vida, llegando al nivel de los años vividos junto a Cecilia. Disfruté cada día vivido con mamá. No hubo peleas ni gritos; y siempre que volví a casa me sentí envuelto en un aura protectora. Charlar con ella, disfrutando de todo su potencial ingenioso. Ayer estuvo Carlos aquí, a la noche, viendo cómo se comportaban las chicas de arriba y de repente mamá nos trae la bandeja con dos cafés calentitos, tal y como lo hacía cuando vivíamos en Quilmes y yo jugaba al bubble con Leo en la Comodore. Está tan lúcida ella. Recién me vino a decir sobre la cuenta del Banco. Yo aprovecho para recordarle: “Ten cuidado con lo del zolpidem”. Ella me contesta como si defendiera algo que está muy mal con argumentos banales. “¡Igual hay que pedirseló!”, me contesta. Las plantas están como entristecidas cuando recibo malas noticias; aunqué Recién Nacido está más alto. Acabo de oír tacones en el piso de arriba.

Hoy todo parecen malas noticias, pero me levanté entusiasmado con el inicio de una nueva empresa: tomé la decición de iniciar las quejas en contra de la biblioteca. Pero el pequeño ordenador Thompson no arranca. El ruidoso portátil Acer encendió luego de media hora de nuevos trucos para intentar arrancarlo.

Lunes 23, 8.30am_Diario de zolpidem. Estamos a punto de ir al abogado para entregar los papeles finales para mamá. Estoy algo dolido y otro algo preocupado, no sé si mamá estará bien alte la fiscal. Le es muy difícil resistirse a la tentación de tomar zolpidem. Ayer nos quedamos hasta las 11, hablando y hablando de lo que teníamos que hacer hoy. Mamá escribió como tres hojas en un cuaderno y quedamos que para estar más lúcida no tomaría su zolpidem hoy a la noche. Cuando ya van 24 horas de desintoxicación, mamá ya puede recordar todo, aunque con insistencia. El caso es que dialoga perfectamente; cuando pasa una hora capaz que hay que recordarle de qué estuvimos hablando, pero el efecto de la ebriedad que le causaba el remedio ya no lo tiene. Lo cierto es que ayer nos acostamos a las 12, pero ya a las 5 de la madrugada me despertaron sus pasos en el pasillo. Entró a la pieza mientras yo dormitaba y me dice: ¿No viste la demanda de papá? Se había tomado medio zolpidem. Lo confirmé cuando la acompañé para acostarla de nuevo. Me di cuenta entonces cómo es el procedimiento que ella usiliza para dormir: se pone 2 pastillas de zolpidem sobre la mesa de luz y las va ingiriendo de a media a medida que se despierta de noche.

24 de diciembre, 10.22am_Cuando pienso en si papá se presentará en casa esta noche, en el pecho me da un indicio de pánico. Siempre recuerdo cuando el capitán está a punto de morirse cuando es atravesado por una lanza. Y a la vista que ya está muerto quiere llevarse con él también a Martin Sheen. “El capitán Willer”. Igualito es papá. El no es feliz nunca, y su amargura es la lanza con la que quiere atravesar junto a la suya la alegría de los demás.


2019 Dnld


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